Bonsáis bajo el cielo de Sicilia. 2010
Pantina, Luca.
Bonsáis bajo el cielo de Sicilia es el título del proyecto que presentaré próximamente en Japón. Bonsáis, como síntesis y expresión de la naturaleza. Bajo el cielo, recuerda la expresión “Vanguardias bajo el cielo”, que era la manera de definir a los miembros del grupo Gutai, debido a sus costumbres de montar exposiciones al aire libre. El movimiento artístico Gutai nace en Japón en los años cincuenta, devolviendo el protagonismo al País, quedando fuera de la escena artística mundial. Influido por el informalismo occidental, el movimiento Gutai se mantiene fiel a la filosofía Zen. Los artistas del grupo utilizan varias "técnicas" como pintura, la caligrafía, y también la performance o la acción, obras teatrales e improvisaciones, buscando una fuerte implicación con el público, mas allá del arte, por medio del experimentalismo. Estas formas artisticas se anticiparon al Fluxus, el happening, el accionismo, el expresionismo americano y el action painting. Un arte que pretende ser una manera para descubrir el Yo, donde el espíritu y la materia se funden juntos. Una fuerza expresiva, una pintura de trazos rápidos, son algunas de las características de un arte nunca improvisado. Treinta pinturas, de tamaño pequeño, sobre papeles indios hecho de mano, cuadrados, redondos y rectangulares. Treinta árboles de dimensiones monumentales de Sicilia, todas plantas milenarias. Mi búsqueda se concentra en la parte baja del árbol, en el tronco, un viaje desde lo bajo, hasta lo más alto y lejano. El tronco es también una parte importante de un bonsái, no por casualidad forma dos tercios de su altura total. En Japón y en Oriente, el bonsái es la unión entre el arte y la naturaleza. Como en el arte existen algunos ejemplares de valor inestimable. Estas obras de arte son una continua y lenta evolución, mientras que, en nuestra sociedad todo es cada vez más rápido. El bonsái es una obra inacabada y que necesita cuidarla siempre. Un bonsái, puede trasmitir fuerza, madurez y sobretodo paz y tranquilidad. El bonsái que conocemos hoy en día es japonés, aunque sus origenes, hay que buscarlos en China. Los japoneses hicieron de estos cultivos un arte, poniendo en práctica los conceptos de la filosofía Zen. Con este trabajo confirmo mi interés por algunas prácticas orientales, la pintura Zen y todo el arte del grupo Gutai.
